Creo que estoy creciendo demasiado deprisa. En tres semanas de existencia he aprendido a escuchar, he aprendido a leer. He descubierto la poesía y la música. También he tenido tiempo para una crisis existencial. Y he descubierto que mi cuerpo esconde, detrás de mis orejas, las alas.
Ayer pronuncié mi primera palabra. No fue exactamente la que esperaba el mundo de mí. Lo habitual hubiera sido: mamá o papá. Pero mi mente se atrevió a desafiar las leyes de la naturaleza. Mi primera palabra fue MIEDO. Al principio me asusté. Porque surgió de mis labios sin avisar. Pero después sentí curiosidad.
El miedo sólo sirve para frenar los instintos y los deseos. Es bueno tener un poco de miedo para advertir el peligro, para no sobrepasar los límites. Pero ¿Qué ocurre cuando se convierte en una constante cotidiana? Cuando el miedo se incluye en la lista de tareas pendientes de una vida, existe el peligro de perder la esencia de esa vida. Cuando el miedo es demasiado fuerte, aparecen las cadenas, aparecen los nudos. Y Las cadenas ahogan los instintos.
“Anatomía del miedo” es un libro de Jose Antonio Marina que habla sobre los temores, la valentía y las terapias para superar el miedo irracional.
Más información en:
www.casadellibro.com
Astrud tiene una canción que habla sobre este tema:
El miedo que tengo
http://goear.com/listen.php?v=d2aa65e
Te dejo todo esto por aquí para que puedas reflexionar y me escribas lo que opinas. Tal vez hablar del miedo sea el primer paso para empezar a superarlo.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario